La Segunda Guerra Mundial fue un conflicto militar global que se desarrolló entre 1939 y 1945. En él se vieron implicadas la mayor parte de las naciones del mundo, incluidas todas las grandes potencias, agrupadas en dos alianzas militares enfrentadas: los Aliados y las Potencias del Eje. Fue la mayor contienda bélica de la Historia, con más de cien millones de militares movilizados y un estado de «guerra total» en que los grandes contendientes destinaron toda su capacidad económica, militar y científica al servicio del esfuerzo bélico, borrando la distinción entre recursos civiles y militares. Marcada por hechos de enorme significación que incluyeron la muerte masiva de civiles, el Holocausto y el uso, por primera y única vez, de armas nucleares en un conflicto militar, la Segunda Guerra Mundial fue el conflicto más mortífero en la historia de la humanidad,1 con un resultado final de entre 50 y 70 millones de víctimas.
Además de los horrores propios de toda guerra, la Segunda Guerra Mundial introdujo formas de sufrimiento no achacables a la propia escala de la misma:
-Deportaciones masivas a campos de concentración y de trabajo, organizados en Europa por Alemania (contra judíos, homosexuales, eslavos, discapacitados, gitanos, Testigos de Jehová, comunistas, españoles republicanos, sacerdotes católicos y ministros de otras religiones, etc.), que se convertirían en campos de exterminio donde tendría lugar el Holocausto.
-Masacres masivas de población y de prisioneros enemigos y violaciones masivas de mujeres.
-Experimentos científicos usando prisioneros realizados por médicos nazis y japoneses, que solían acabar con la muerte del individuo.
-Guerra después de la guerra: Combates en Indochina entre franceses y movimientos separatistas creados tras el vacío de poder que ocasionó la guerra, guerra civil en Grecia y Turquía, etc.
Mientras que territorialmente la guerra tuvo las siguientes consecuencias:
La Segunda Guerra Mundial contribuyó a que emergieran dos superpotencias que buscaban repartirse el mundo: Estados Unidos y la URSS.
El bloque capitalista: liderado por los Estados Unidos y con influencia en Europa Occidental.
El bloque comunista: liderado por la URSS y con influencia en Europa del Este.
Rusia se anexionó Estonia, Letonia, Lituania, el este de Polonia y partes de Finlandia y Rumanía. Polonia recibió territorios de Alemania (Pomerania, Silesia y la mitad de Prusia Oriental). Austria recuperó su independencia en 1955.
Alemania quedó dividida en cuatro zonas de influencia: Estados Unidos, Francia y Reino Unido unificaron sus respectivas zonas en la República Federal Alemana y la URSS hizo lo mismo con su zona que se convirtió en la República Democrática Alemana, hasta 1990, cuando los Länder que la conformaban se incorporaron a la República Federal de Alemania, dando lugar a la reunificación alemana y a la creación de la actual Alemania.
La guerra dejó al descubierto la debilidad de los países europeos y los movimientos de independencia de las colonias se generalizaron con el apoyo de las dos superpotencias. Los ejércitos de las potencias coloniales no tenían ya capacidad para controlar dichos movimientos, por lo que a lo largo de la segunda mitad del siglo XX se produjo la llamada descolonización.
-Deportaciones masivas a campos de concentración y de trabajo, organizados en Europa por Alemania (contra judíos, homosexuales, eslavos, discapacitados, gitanos, Testigos de Jehová, comunistas, españoles republicanos, sacerdotes católicos y ministros de otras religiones, etc.), que se convertirían en campos de exterminio donde tendría lugar el Holocausto.
-Masacres masivas de población y de prisioneros enemigos y violaciones masivas de mujeres.
-Experimentos científicos usando prisioneros realizados por médicos nazis y japoneses, que solían acabar con la muerte del individuo.
-Guerra después de la guerra: Combates en Indochina entre franceses y movimientos separatistas creados tras el vacío de poder que ocasionó la guerra, guerra civil en Grecia y Turquía, etc.
Mientras que territorialmente la guerra tuvo las siguientes consecuencias:
La Segunda Guerra Mundial contribuyó a que emergieran dos superpotencias que buscaban repartirse el mundo: Estados Unidos y la URSS.
El bloque capitalista: liderado por los Estados Unidos y con influencia en Europa Occidental.
El bloque comunista: liderado por la URSS y con influencia en Europa del Este.
Rusia se anexionó Estonia, Letonia, Lituania, el este de Polonia y partes de Finlandia y Rumanía. Polonia recibió territorios de Alemania (Pomerania, Silesia y la mitad de Prusia Oriental). Austria recuperó su independencia en 1955.
Alemania quedó dividida en cuatro zonas de influencia: Estados Unidos, Francia y Reino Unido unificaron sus respectivas zonas en la República Federal Alemana y la URSS hizo lo mismo con su zona que se convirtió en la República Democrática Alemana, hasta 1990, cuando los Länder que la conformaban se incorporaron a la República Federal de Alemania, dando lugar a la reunificación alemana y a la creación de la actual Alemania.
La guerra dejó al descubierto la debilidad de los países europeos y los movimientos de independencia de las colonias se generalizaron con el apoyo de las dos superpotencias. Los ejércitos de las potencias coloniales no tenían ya capacidad para controlar dichos movimientos, por lo que a lo largo de la segunda mitad del siglo XX se produjo la llamada descolonización.
Nicole Canó ; Alexander Villalona